Y se acabó el año para el blog. El resumen de lo mejor del año finaliza con esta entrada. Han sido doce meses excelente. Si el blog no ha sido muy leído por lo menos buena música si he disfrutado.
5. Ebb Away – …And You Will Know Us By The Trail Of Dead.
Canciones como esta ya no se hacen. Épica de principio a fin.
4. Soul – Rival Sons
De Rival Sons se esperaba con ansías su segundo álbum que saldría este año. Pero fue el EP, Rival Sons, el que logró satisfacer los oídos. Y entre ese paquete fulminante destaca la transgresora Soul.
3. Mexican Grand Prix – Mogwai
Los virtuosos escoceses de post rock dan cátedra en Mexican Grand Prix sobre como se debe enlazar unos sintetizadores junto a guitarras, bajo y batería.
2. Holding On To Black Metal – My Morning Jacket.
Entre Folk, Psicodelia y Gospel fue lo que grabaron los de Kentucky dentro de de una iglesia del siglo XIX, con todos los músicos formando un círculo. Gran sentido del humor y preciosos arreglos son los elementos destacados.
1. Ice Cream – Battles
“Como un helado derritiéndose”, es lo que canta Matías Aguayo, el chileno que se destaca en la escena electrónica alemana y que en este caso es invitado a participar junto a la banda de rock matemático Battles. La canción del año.
Gracias a todos los que en este año acompañaron el blog. Nos vemos en unas semanas.
La industria musical es una mierda, ¿por qué?. Pues, por industria. Sí, ya se que yo escribo desde mi “burocrático cubículo corporativo”, y que no tengo la conciencia para criticar a la industria. Pero que le vamos a hacer, los que escribimos blogs somos unos subjetivos contradictorios. Y esta vez digo que la industria musical es una mierda porque me doy cuenta que a medida que se acercan los días para que las revistas especializadas sienten su posición sobre cuales son los mejores álbumes del año, se van lanzando nuevas producciones. Es así, que tenemos a Bjork, Metallica con Lou Reed, Coldplay y Alice Cooper, estrenando juguetes en los últimos 15 días. Y uno compara cualquiera de esas nuevas producciones con Tao of the Dead, y … no, no hay punto de comparación.
Trail of Dead, como también se le conoce a And You Will Know Us By The Trail Of Dead publicó su álbum versión 2011 en febrero, porque les importa un carajo las tendencias de la industria.
Dignos herederos de The Who, más por su concepto que por su sonido. Esta banda oriunda de Austin presenta su más reciente producción que tiene un hermosísimo título, una bellísima portada y doce más que convincentes canciones. Un banda donde sus dos principales integrantes, Conrad Keely y Jason Reece, intercalan guitarra y batería mientras que los dos aportan voces es algo para estar atentos.
Entraron al estudio y grabaron estos 52 minutos en tan solo en 10 días, como se usaba hace cuarenta años, y con la participación de tan solo 4 de los 6 integrantes habituales. El álbum es conceptual idea que espanta a cualquier banda en tiempos donde la inmediatez impera. El resultado: Un álbum pirotécnico y extravagante.
A primera escucha no le encontré mayor gracia, excepto a la instrumental Somewhere Over The Double Rainbow. Pero poco a poco descubrí la gracia de otras piezas como Summer of All Dead Souls (gracias a su video) y Weight of the Sun (Or, the Post-Modern Prometheus). Después Ebb Away la escuché con detenimiento y es de no creer. Apasionada y llena de virtuosismo. Ya con esa parte del álbum abarcado, poco a poco fueron entrando las otras canciones, llenas de energía, vértigo, crescendos y cambios de ritmo en los que otras bandas morirían al intentarlo.
Lo que transmite la portada, también transmite la música. Muchos colores, muchas imágenes. Por momentos recargado pero lleno de virtuosismo y belleza, no ha espacio para la relajación, parece una avalancha que nos envuelve, atrapa y estrangula satisfactoriamente.
Para los que conocen el sonido y la trayectoria de Trail Of Dead es Introduction: Let Us Experiment, es un mensaje de “acá estamos con la misma propuesta ambiciosa, apriétense los cinturones”. De ahí en adelante todo va hilado. Pure Radio Cosplay es algo que deben escuchar los fanáticos de The Who con mente abierta. Summer of All Dead Souls, es oscura e intensa. Cover The Days Like A Tidal Wave es una especie de increscendo-bicho_raro. Fall Of The Empire tiene un bajo que crea una atmósfera angustiante. Es raro encontrar influencias de pop ochentero en los teclados de The Wasteland. The Spiral Jetty, es una transición y Weight of the Sun (Or, the Post-Modern Prometheus) es para cantar con los puños al aire. Pure Radio Cosplay (Reprise), siendo sinceros, parece que sobra. Ebb Away, ya lo había dicho arriba, es de no creerlo. La intensidad del coro quiebra almas.
En Somewhere Over The Double Rainbow parecen unos The Who demenciales en pleno siglo XXI. Y la prueba final se llama Strange News From Another Planet, cinco canciones en una, conceptual, ambiciosa y fantástica que por momentos agota pero hay que escucharla.
Es un álbum que no tiene espacio en la industria pero de seguro que en sus reproductores musicales si lo encontrará.